Tu Community Manager no puede ser tu sobrino y otras verdades absolutas que debes conocer

Seamos claros, el que algo quiere, algo le cuesta. Si pretendes conseguir más clientes, aumentar el reconocimiento de tu marca y mejorar tu reputación online, deberás invertir en marketing y en redes sociales.
Decir que tu sobrino no puede ser tu Community Manager equivale también a no elegir a tu cuñado, tu amigo, tu primo o el vecino del quinto, “que sabe mucho de Facebook” para gestionar las redes sociales de tu negocio.
Seguramente, ese "sobrinillo" que tantísimo sabe de redes sociales, se habrá ofrecido para ayudarte en tus comienzos digitales. Puede ser que al principio lo haga, incluso puede que te cree los perfiles y se ponga a invitar a amigos consiguiendo algo más de lo que tú tenías, que seguramente era NADA.
Por suerte esta no es una tendencia universal y es que cada vez hay más empresas que consideran muy arriesgado dejar la gestión de imagen de su compañía en manos de cualquiera.
Hay muchas razones ( obvias la mayoría ) por las que no debes hacer esto, pero voy a destacar dos que para mí van de la mano:
1- NO SE GESTIONA IGUAL UNA RED PERSONAL QUE UNA PROFESIONAL
Todos los que tenemos redes sociales somos en esencia Community Managers y generamos contenidos, pero es totalmente distinto hacerlo social que profesionalmente.
El Community Manager es nuestra cara reconocible en formato digital, el vínculo entre el cliente y la marca, el activo más valioso de un anunciante.
¿Realmente queremos que esta labor, vital en nuestra estrategia de marketing digital, se realice de forma precaria?
2- NO SÓLO DE ACTUALIZACIONES VIVEN TUS REDES
Puede que tu sobrino sepa mucho de Redes Sociales pero no de gestión. El trabajo de un buen Community Manager va mucho más allá de publicar post en Facebook o en Twitter o poner medio mono una publicación de Instagram.
Para gestionar redes profesionales se necesita una formación específica en gestión de comunidades, gestión de contenidos, manejo de crisis, SEO, redacción, copywriting, monitorización y análisis de las herramientas que incluyen métricas, KPI y gráficos.
Las redes sociales pueden ser muy beneficiosas para tu empresa, pero con una gestión poco profesional, pueden llegar a ser muy perjudiciales.
Dios me libre de ser catastrofista, pero son ya muy sonados los casos de escándalos que se han dado en redes sociales como consecuencia de un “profesional” que no ha sabido estar a la altura de las circunstancias, y es que, cuando lo que corre peligro es la imagen de la compañía, lo mejor es no jugársela.
Créeme, invertir en profesionales resulta rentable.